![]() |
|
|
ESCULTURA SUMERIA
Mesopotamia, o el País entre Ríos, término proveniente del griego mesos (medio), potamos (río), se encuentra distribuido entre los actuales estados de Siria e Irak. El territorio combina una zona de meseta, la Alta Mesopotamia, y una llanura aluvial que constituye la Baja Mesopotamia, teniendo como límites una serie de accidentes geográficos:
En el transcurso del VII m. a. C. comienzan a surgir en Mesopotamia una serie de pueblos que, gracias a los avances agrícolas y ganaderos, sufren un incremento paulatino en el tamaño de los asentamientos así como en las poblaciones existentes, lo que también conlleva una mayor especialización en el trabajo y la aparición de contactos comerciales más frecuentes en busca de las materias primas de las que se carece. Con el desarrollo de los sistemas de irrigación, la agricultura se extiende al centro y sur de Mesopotamia, facilitando la aparición de nuevos asentamientos que se articulan en una serie de culturas. La cultura de Hassuna se desarrolla durante la primera mitad del VI m. a. C. en el norte de Mesopotamia. De ella se conoce el cultivo de cereales, trigo escanda, carraón[1] y cebada de dos carreras y sin cáscaras, y la cría de ganado, fundamentalmente ovejas, cabras, ganado ovino y cerdos, que se complementan con la caza de bóvidos, gacelas y onagros.
Durante la cultura de Tell el’Ubeid, datada aproximadamente a mediados del VI m. a. C., su rgen los primeros establecimientos en las zonas meridionales de Mesopotamia. Estos asentamiento también basan su economía en la agricultura de regadío, aprovechando las inundaciones del Eúfrates con el fin de obtener cosechas más abundantes. Ejemplo de esta cultura es Eridú, población que llegaría a poseer alrededor de 4000 habitantes, estimulando un desarrollo de los contactos comerciales así como la aparición de un rudimentario sistema de contabilidad, que a la larga llevaría a la creación de la escritura como forma de controlar la economía.
En esta última ciudad, y con fechas de 3250 a. C. aproximadamente, aparecen los primeros registros con la “escritura” más primitiva, que combina una serie de números con representaciones de animales domésticos. La escritura silábica sumeria más antigua conocida se data hacia el 2500 a. C. aproximadamente y proviene de Abu Salabikh, población cercana a Uruk. Gradualmente comienzan a aparecer otras ciudades como Nínive, Tepe Gawra, Eshunna, etc..., que hacia el 2300 a. C. serán unificadas por Sargón de Accad. A la fase final del IV m. a C. se la denomina Época Dinástica Arcaica, aunque también es conocida como Protodinástico o Época Presargónida. En este período ya se podría comenzar a hablar de sumerios, denominados en algunas fuentes como "Cabezas Negras". Posteriormente en Mesopotamia se asentarán diferentes grupos de población:
[1] Trigo de espigas dísticas, es decir, colocadas en dos filas y comprimidas, y de grano también comprimido. |