Localizado en el nivel neolítico de la Cueva
de Nerja, situada en la costa oriental de Málaga. Esta cueva fue
descubierta en 1959, y a partir de entonces, se han realizado diversos
estudios de investigación, cuyos resultados han demostrado que nos
encontramos ante uno de los yacimientos prehistóricos más importantes de
Andalucía.
La ocupación de la cueva se remonta al Paleolítico Superior, prolongándose
hasta la Edad del Cobre. Por los materiales arqueológicos localizados en
su interior, se desprende que esta cavidad fue usada como lugar de
asentamiento y enterramiento y, además, debido a sus importantes pinturas
rupestres, como santuario o lugar cultural. Dichas pinturas, aplicadas a
veces a estalactitas, representan por un lado a diferentes tipos de
animales y, por otro a una serie de signos abstractos que deben formar un
repertorio de símbolos.
Este cuenco, de forma simple y paredes alisadas, es muy común a finales
del Neolítico y está representado en numerosos yacimientos de la provincia
de Málaga. Está realizado a mano. Su base es curva y las paredes abiertas.
Carece de decoración. La pasta es rojiza y se aprecian algunas manchas
oscuras, quizás debidas a los contactos que debieron producirse entre las
vasijas dentro del horno alfarero en el momento de su cocción. |