REA: Era una de las titánidas, hija de Gea y Urano. En el mundo romano, Rea, identificada con la Tierra fue  asimilada a la diosa Cibeles. De su matrimonio con Cronos nacieron seis hijos,  de los cuales Hestia, Demeter, Hera, Hades y Poseidon fueron devorados al nacer.

Zeus: fue dado a luz en una cueva de Dicte, en Creta, y confiado a los Curetes (iban armados, y su misión fue golpear los escudos con las lanzas para que Crono no escuchara la voz de Zeus niño) y  a las ninfas Adrastea e Ida, hijas de Meliseo, que le criaron con la leche de Amaltea. Rea entregó a Crono una piedra envuelta en pañales que él devoró

Cuando Zeus creció, y ayudado por Metis, hija de Océano, que le dio a beber a Crono un bebedizo gracias al cual vomitó, primero la piedra, y tras ella a sus hermanos, se levantó contra su padre y los Titanes, con los que estuvo en lucha durante diez años. En ese período de tiempo, Gea, su abuela, le profetizó que sólo vencería si soltaba a los Cíclopes encerrados en el Tártaro, cosa que Zeus hizo matando a Campe, su guardián, y soltándoles las ataduras. Los Cíclopes entregaron a Zeus el rayo, el trueno y el relámpago, a Plutón el yelmo y a Poseidón, el tridente, y gracias a ello venció. Los Titanes fueron encerrados en el Tártaro, y los Hecatonquires fueron puestos como vigilantes. Tras vencer a Crono, se repartieron el mundo, tocándole a Zeus el cielo, a Poseidón el mar, y a Plutón el Hades.